Andrea trabaja desde hace 8 años como encarnadora en Caleta Portales, una caleta de pescadores artesanales ubicada en Valparaíso, Chile. Su labor consiste en desenredar y limpiar los anzuelos que les entregan los pescadores tras la jornada de pesca y volver a encarnarlos con sardinas para la siguiente jornada. Andrea vive con sus dos hijas y sus dos nietos y es la sostenedora de la familia.
Este trabajo pretende dar visibilidad a la figura de la mujer en la pesca, un mundo tradicionalmente masculino, a través de un retrato cotidiano en el lugar de trabajo.